Las cosas ya parecen que van
mejorando, y aunque un poquito dolorido el tobillo todavía, ya empieza a
funcionar debidamente. Sigo reacio a meterme en zonas muy técnicas, pero aunque
sea solamente por pistas y senderos anchos, ya llevo dos semanas encadenando
unos buenos puñados de kilómetros, no tantos como me gustaría, pero es que
nunca son suficientes. Incluso ya hasta me estoy planteando alguna que otra
competición. ¡Ya os contare!
Estas últimas salidas me ha dado
para seguir probando material, queriéndoos hablar en esta entrada de unas muy
buenas zapatillas: la Ultra Trail de The North Face, que he tenido la suerte de
testar gracias a mi actual esponsorización con esta maravillosa marca que se esta abriendo un gran hueco en las carreras por montaña.
Son unas zapatillas que tenía muchas
ganas de llevar desde que leí el exhaustivo análisis que hizo de ellas mi
compañero de Club Jesús Molina en su blog “Corriendo
desde el Llano de Molina” pero hasta hace bien poco no me pude hacer con
unas. Desde que las tengo, no puedo quitármelas, y no es porque me queden muy
justas sino porque se adaptan perfectamente a la actividad en la que actualmente
estoy enfrascado: pista, pista y algún que
otro sendero ancho.
Jesus Molina, Autor del Blog: "Corriendo desde el Llano de Molina" |
Lo primero es resaltar el gran
parecido con las Hyper
Track Guide, otro modelo de la casa The North Face que tantos agradables
momentos me han hecho pasar por el monte. Aprovechando la coyuntura comentar
que en los últimos modelos de la Hyper Track Guide se ha mejorado la suela a la
altura del talón, una de las pocas cosas malas que tenían.
The North Face no se conforma
solo con mejorar sus antiguos modelos, sino que evoluciona presentándonos otros
más modernos, para que podamos
disfrutar de toda su tecnología aplicada a nuestros pies.
Valoración personal:
Extremadamente
ligeras (246 gr. para la talla 9 de hombre) con un escaso drop (8 mm) pero con
una gran amortiguación gracias a su plataforma de media suela EVA CRADLE GUIDE™
moldeada con doble inyección.
Incorpora suela VIBRAM®
con un taqueado hexagonal adecuado para
zonas de montaña, perdiendo un poco de agarre en las bajadas muy técnicas pero
con muy buenas prestaciones en pistas y senderos.
Gran flexibilidad, que junto
a su reducido drop, puedan ser consideradas por algunos, como unas zapatillas
de tránsito hacia el minimalismo. Aunque yo de eso poco entiendo y espero que
alguien pueda iluminarme.
Este modelo sigue
incorporando la tecnología CRADLE® para controlar la posición correcta del pie,
que a mí me viene tan bien por mi marcado carácter pronador. Desde que se
incorporo CRADLE® a las zapatillas The North Face he dejado de deformarlas
hacia dentro, evitando así molestos dolores en las caderas.
Gracias a un interior acorchado
con tecnología Flashdry™, a las costuras termoselladas y a la malla Ultra
Airmesh (transpirable y protectora), he conseguido llevar el pie siempre seco, cómodo
y sin rozaduras.
En resumen: unas zapatillas para
volar por la montaña sin perder protección en nuestras articulaciones. Y seguro
que algo de esto tiene que ser verdad, cuando recientemente han sido premiadas como el mejor debut de una zapatilla de montaña por la revista Runner´s World
USA.
Algo tendra el agua cuando la bendicen y si, para una transicion pueden ser buenas, aunque yo ya voy tarde pa eso. Un saludico.
ResponderEliminarMuy buenas zapatillas running, parecen muy comodas; y eso es fundamental para realizar este deporte
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